Corto

Muy buenas, niñas y niños

Es lunes y el tiempo pasa despacito, sobre todo, parecerá haberse detenido después de comer, pero de momento simplemente lleva la velocidad de un caracol-col-col.

No tengo mucho que contar… Este fin de semana Janis vino a visitarnos con papis y hermano y nos fuimos todos juntos a la Alsacia a ver monos y águilas. Y es que cerca de Colmar hay un sitio –un monte, pa más señas– donde tienen un montón de macacos de Gibraltar sueltos en una especie de reserva y puedes verlos y darles de comer palomitas (y sólo palomitas, que te dan a la entrada). Lo de las águilas está en el mismo monte, instalado en un pequeño castillo medieval, y hay un espéctaculo donde las aguilas, milanes, buitres y halcones te pasan volando por encima de la cabeza y, si te descuidas, te quedas sin pelos ¬¬ (A la vuelta en la autopista nos encontramos con una caravana que nos tuvo tres cuartos de hora semiparados a 15 kilómetros de Basilea… Es, en estos momentos, cuando odio con toda mi alma ser una mujer, sobre todo, cuando necesitas ir al baño T___T En 45 minutos al menos una docena de tíos se bajaron de sus coches a regar los arcenes salvajes de la France. Yo fui la única mujer que contribuyó en la tarea del reciclaje de aguas xDDDD)

Y mirad esto: http://www.swatch.com/cortomaltese/. Éste es mi nuevo reloj, una edición especial de Swatch para conmemorar los 40 años de Corto Maltés. Para aquellos que no lo sepan o no tengan ganas de ir a buscar sobre ello en la (oh, grandisima) wikipedia, “Corto Maltés” es un cómic creado por el italiano Hugo Pratt, sobre las aventuras de un capitán intrépido y seductor de principios del siglo XX. A lo largo de sus peripecias, que le llevan por los mares del Sur, África o Siberia, Corto conoce a diferentes personajes históricos y es testigo de acontecimientos que marcarían a la humanidad. A destacar de este cómic, el peculiar dibujo y la técnica que usa Pratt, así como las exhaustivas investigaciones que llevaba a cabo para dotar de credibilidad a su personaje. Corto Maltese es uno de los héroes de cómics que más me ha gustado (e impresionado, señores, que Corto tiene una personalidad muy interesante y atrayente *-*) de todos los que he leído hasta ahora. Lamentablemente sólo he podido leer el primero de los tomos (por orden de publicación, no cronológicamente hablando), “La balada del mar salado”, y actualmente tengo el resto de tomos en busca y captura. Pero a la vista de que es bastante complicado encontrarlos, al menos por estos lares, tendré que conformarme con que Corto Maltés me mire desde la esfera de mi reloj cada vez que quiera saber la hora –otra cosa será que sepa qué hora es u.u–, y con la lectura de otros cómics (The Boondocks o Persépolis, por ejemplo) y mangas (Nana o Skip Beat, e.g.). Lilith, muchas gracias por hablarme del cómic y despertar mi interés 😉

Y no tengo mucho más que contar. ¡Ah, sí! En el curso de Software Testing que hice a finales de septiembre hice un examen para ser ISTQB© Certified Tester y… aprobé… por los pelos, pero aprobé xDDDD

Ya está, ahora sí que he acabao ~(O_o)~

Con esto y un bizcocho… Besos
Cris

PS: He cambiado la canción del blog por “The wind that shakes the barley” del dúo Dead can dance, que estoy segurísima que, si Nuska aún no lo conoce, le encantará ^__^

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *