El día 1 de agosto, después de publicar el vídeo de #suiza101, nos fuimos a casa de uno de nuestros amigos a celebrar la fiesta nacional. El amigo en cuestión vive a 10 minutos en bici de casa y su jardín da al Dünnern, un afluente del Aare*.
Como muchos de vosotros ya sabréis, mi chico es como un niño pequeño con dinero y le mola comprarse juguetes 😛 Uno de esos juguetes en cuestión es un bote teledirigido de nombre Desperado Jr.. Desde que lo tiene, cada vez que vamos a casa del amigo se lo lleva para jugar en el río con él (los amigos también tienen sus propios barcos…). El mayor problema del barco y el río es que la batería dura poco tiempo y el río tiene corriente, así que puede darse la situación en la que el barco se quede sin batería al otro lado del río y se lo lleve la corriente. Hasta ahora esto había producido alguna que otra operación rescate divertida, pero sin grandes consecuencias… hasta este 1 de agosto xDD
¿Qué pasó? Pues primero el bote de Migge se dio la vuelta en una curva cuando estaba algo alejado y, como el río llevaba agua y la corriente era bastante fuerte, se le escapó en un milisegundo. Migge salió detrás de él, pero iba a ser difícil rescatarlo yendo por el agua. Cuando Migge estaba en pleno trabajo de recuperación de su juguete, al de Christoph le pasó lo mismo. Intentaron avisar a Migge para que lo cogiera también, pero ese tiempo perdido en llamar al compañero, hizo que el bote se le escapara todavía más.
Yo, viendo que ninguno de los dos iba a conseguir alcanzar su barco con esa estrategia, dejé la cámara en la mesa y salí corriendo por la carretera, río abajo, con la idea de que desde la carretera igual era más fácil adelantar a los botes. Mi idea no era mala, pero para cuando yo localicé el de Christoph, entrar al agua me llevó demasiado tiempo y el barco pasó flotando frente a mis narices. Para más inri, una vez en el agua, perdí uno de mis Crocs (mis preferidos, encima ¬¬) y no fui capaz de encontrarlo. Salí del río escalando por la ribera a través de zarzales y seguí andando por fuera río abajo, donde encontré a Christoph saliendo del agua con su barco, mi zapato y unas flip-flops xDDD Y en ese momento, es cuando nos dimos cuenta de que me estaba sangrando la pierna, por lo visto los zarzales habían hecho de las suyas (de hecho, tengo toda la espinilla arañada, me han preguntado que si tengo gato xD).
El barco de Migge lo consiguieron salvar porque salieron con el coche a adelantar a la corriente del río, pero Migge también sufrió «heridas de guerra». Como iba descalzo, se clavó las espinas de los zarzales en la planta del pie, ¡ay!
Aunque todo esto parezca así como muy dramático (¿y pa qué negarlo? a mí casi me da un mal cuando vi que había perdido uno de mis Crocs favoritos >.<), en el fondo fue superdivertido, o al menos, después nos estuvimos descojonando un rato recordando el episodio, y ¡hey!, para mi chico fui la heroína del día xD Además, me acordé mucho de Nerea, que el año pasado celebró el 1 de agosto con nosotros en esa misma casa, y también vivió una minioperación rescate xD Lo que aprendimos de todo esto es que, en el futuro, esos barcos caros deberían usarse únicamente en aguas calmadas como las del lago de Zug, por ejemplo 😛
El caso es que fue un primero de agosto emocionante, aunque al final del día los amigos de Christoph acabasen mandándome a freír espárragos por no parar de hacer fotos 🙄 —tampoco es que hiciese tantas, pero de noche estuve probando mi objetivo de 50mm f/1.4 y parece que les acabó molestando el ruido del disparador y que los usase como modelos—. Tampoco es que fuese el 1 de agosto más interesante o el mejor que he vivido desde que estoy en Suiza, pero estuvo guay y tuvimos aventura para contar a familia y amigos, así que, en el fondo, no estuvo tan mal xD
Y bueno, eso es todo lo que ha pasado últimamente en mi vida. Este fin de semana grabaré vídeos, así que estén atentos que pronto llegaré con más cosillas para el canal de YouTube 🙂
Con esto y un bizcocho… Besos
Cris
PS: *El Aare se llama Aar en español, pero me parece más natural usal el nombre en alemán, sobre todo, porque por una vez es más sencillo decir Aare que Aar, ¿no os parece?